Gracias, gracias y gracias, #LigaBBVAExperience

Recuerdo cuando nos dieron la oportunidad de vivir la #LigaBBVAExperience. No podía creérmelo. Viajaría a España, vería el Granada-Barcelona en directo y conocería la ciudad, donde no había estado antes, y todo ello junto a mi hijo, Idan. Las expectativas eran muy altas, pero se superaron con creces.

Todo fue fantástico y no exagero al decir que la #LigaBBVAExperience nos ha cambiado la vida a mi hijo y a mí. Al principio fuimos un poco tímidos, sobre todo él, pero con el transcurso de los días, llegamos a estar como en casa, porque así nos hicieron sentir. Nunca podré agradecerlo suficiente.

La gente en Granada es diferente, es especial. Sentimos ese calor y esa amabilidad que les caracteriza, desde el principio. Sobre la ciudad, no tengo palabras. Nos encantó. Más bien, nos dejó con la boca abierta. Cada rincón, cada calle... sobre todo la Alhambra. Ya nos habían hablado de ella, pero es mucho más impresionante de lo que pensé. Cada parte de la ciudad la llevó grabada en la memoria, además de en mi cámara de fotos. ¡Qué ciudad tan especial!

Pero, sin duda, lo mejor fue el fútbol. Nada más llegar, LaLiga ya nos tenía preparada la primera sorpresa: una camiseta de cada equipo para cada uno, una bufanda, pinturas... Cómo disfruté viendo a mi hijo con cada regalo. Nunca olvidaré tampoco el gran día. El del partido. Vimos al Barcelona ser campeón, algo que nos hizo una gran ilusión. Pero el día empezó antes, porque comimos con las peñas del Granada y del Barcelona, que nos trataron como uno más. Risas, cánticos y mucho fútbol. ¡Repetiría una y mil veces! De verdad, que privilegiados fuimos al vivir desde dentro todo esto.

Y todo lo que vino después. ¡Aún no lo he podido asimilar! El Estadio Los Cármenes nos encandiló. Sobre todo pisar el césped, donde estaban todos los jugadores calentando... Los teníamos tan cerca. Los 90 minutos que duró el partido se transformaron en emociones, nervios y euforia. Con cada gol del Barcelona, con cada ocasión del Granada… no podíamos contenernos, fuimos un aficionado más. Todo fue perfecto, aunque aún no terminaron las sorpresas. Al terminar el partido... ¡Guau!... Conocimos a los jugadores del Granada. Mi hijo se llevó la camiseta llena de autógrafos y yo me llevé una alegría enorme al verle tan feliz.

Conocimos la ciudad, vimos un espectáculo de flamenco en directo, comimos los platos más típicos de Andalucía y sentimos el fútbol español en nuestra propia piel. Ver a mi hijo así de feliz, me hizo a mí la persona más feliz del mundo. Por todo esto y más: gracias, gracias y gracias, #LigaBBVAExperience.