El Sevilla FC se crece en el Sánchez-Pizjuán

Kevin Gameiro y su olfato goleador
Tan solo dejó pasar un minuto el ariete francés para demostrar la capacidad que tiene para encontrar la red de la portería rival. Especialmente cuando el partido es el Ramón Sánchez-Pizjuán, donde suma 11 tantos de los 12 que suma en la competición doméstica. Esta vez, una buena jugada por la banda izquierda con una espectacular asistencia con la espalda de Iborra, dejó el balón suelto en el área para que el '9' del Sevilla llegase con potencia para remachar el 1-0.

Partido emotivo para Iborra
El jugador, nacido en Valencia y que creció como futbolística en el Levante UD, se enfrentaba a sus antiguos compañeros, a los que no perdonó cuando recibió solo de Gameiro para rubricar el 2-0. Abrió la brecha el cuadro hispalense, pero el conjunto visitante llegaba con peligro a la meta defendida por Sergio Rico en lo que significa un intercambio de golpes que al descanso ganaba el Sevilla. 

Titularidad de Rossi
El italiano ya jugó minutos contra la UD Las Palmas en lo que era su regreso a LaLiga. En el Sánchez-Pizjuán su técnico Rubi contó con él desde el once inicial y esa confianza se la devolvió en forma de gol. Anotó el 2-1 que redujo diferencias y que permitía al Levante seguir creyendo en que sacar algo positivo era posible. Poco después, tuvo otra oportunidad para empatar el encuentro, pero la buena intercepción de Rami evitó su doblete.

55' | 2-1 | GOOOOOOLLLLL de GIUSEPPE ROSSIII #SFCvLUD #LUDlive pic.twitter.com/YdUD4l4KeQ

— Levante UD (@LevanteUD) January 31, 2016

Atrevimiento granota
No cejó en su empeño en ningún momento y el Levante, a pesar de ir por debajo en el luminoso desde el primer minuto, no bajó los brazos y creó peligro en todo momento gracias a la habilidad de Rossi y la velocidad de Morales.

El desequilibrio de Konoplyanka
El ucraniano salió cuando quedaban 25 minutos y fue el efecto revulsivo que buscaba Unai Emery. Al contraataque, el '22' sevillista aprovechó la indecisión de la defensa visitante para disparar desde la frontal y alojar el esférico en la escuadra izquierda de Mariño. Un tanto que sirvió para dejar prácticamente sentenciado el choque.