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SÁB 20.12.2014
Apremiado por los últimos resultados. Así llegaba el Girona FC a su cita contra el D. Alavés. Un punto de nueve posibles en las últimas tres jornadas habían metido al equipo de Pablo Machín en una mini crisis de resultados, que le obligaban a enderezar el rumbo. Por su parte, los de Alberto López se presentaban para asentarse en la zona media de la tabla.
La cita fue trabada en su primera mitad con pocas ocasiones claras. De hecho las dos primeras claras por parte de cada equipo terminaron en la red. Richy (27’), de falta, adelantó al Girona, que sólo disfrutó de su tesoro once minutos, pues Galan selló la igualada.
En la reanudación ambos equipos saltaron dispuestos a abrazar sus objetivos. Despotović tuvo el 1-2 (48’), pero la clara ocasión la desbarató la defensa local. La acción sacó de su letargo a un Girona que en 8 minutos acumuló tres ocasiones (Sandaza, Lejeune y Mata), que no terminaron en la red. El Alavés aguantó el empuje local y el duelo volvió a no tener dueño.
Cuando todo parecía abocado al 1-1 final, el duelo enloqueció: Sandaza, de cabeza, hacía el 2-1 (89’), tras aprovechar una falta que Jandro había mandado a la madera. El tanto parecía dejar los tres puntos en casa, pero una falta lateral volvió a mandarle a la lona con el tanto de Juli (91’). El 2-2 dejó helado al Municipal de Montilivi, que ve como su equipo se queda con dos puntos de los últimos doce posibles y felices a unos vitorianos que se asientan en la tabla.
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