Reportajes
MIÉ 30.03.2016
Dicen que los mejores perfumes vienen en frascos pequeños. Y en su caso es cierto. SD Eibar y Villarreal CF vivirán este fin de semana un enfrentamiento en el que, de nuevo, pondrán de manifiesto que las cualidades que les unen son muchas más que las que los separan. La primera, la magia de dos equipos que aspiran a Europa y que se han convertido en el estandarte de sus municipios conocidos ya en todo el mundo.
Con apenas 27.000 habitantes, Eibar ha visto el ascenso estratosférico de su equipo desde la Segunda División B hasta la Liga BBVA, y ahora celebra las mieles de un club que presume de jugarle de tú a tú a los más grandes.
Más curioso es aún el caso de Villarreal, en cuyo estadio de 25.000 localidades cabe la mitad del municipio, que suma 50.000. El 'Submarino Amarillo' ha conquistado a todos con su juego y, este curso, es un serio aspirante a quedarse con el último billete a la UEFA Champions League.
El calor popular, la humildad de sus orígenes, un estilo de juego definido, dos presidentes aclamados por la afición, un gusto exquisitos desde el banquillo, la ilusión de un proyecto valioso y la gran temporada que ambos están cuajando son los valuartes de Eibar y Villarreal, dos clubes de orígenes humildes, pero de aspiraciones insaciables.
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